lunes, 1 de septiembre de 2008

La apuesta de la filosofía medieval

¿Qué relación tiene la filosofía moderna con la medieval?, ¿Existe alguna estructura de pensamiento que una a Ockhan y Duns Escoto con Descartes o Kant?, ¿La separación de la tradición filosófica aristotélica se dió en la filosofía en el siglo XVII o en el XIII?, ¿Tienen algo que ver las reflexiones medievales sobre la transubstanciación con el pensamiento moderno? ¿En que medida la situación actual de la filosofía con su alejamiento del aristotelismo?
Todos estos temas, y algunos más, se tratan en un libro, La apuesta de la filosofía medieval, obra de un misterioso profesor de filosofía suizo (no he encontrado practicamente ninguna referencia a él en internet) llamado André de Muralt. De Muralt, parece ser, nació tal día como hoy en 1931 (así pues, habrá cumplido hoy 77 años) en Suiza, donde ha sido profesor de filosofía en las universidades de Ginebra y Lausana. Sus primeros trabajos versaron sobre fenomenología (hay una traducción de un libro suyo al castellano relacionado con este tema, La Idea de la fenomenología) pero, después de un estudio -no traducido- sobre Kant, se fue decantando, por la filosofía medieval, y más en concreto, por la referida a Santo Tomás, Duns Escoto y Ockhan.
El libro que os presento (que ya tuvo su precedente, hace unos años, en la edición por Istmo de La estructura de la filosofía política moderna) es, en mi opinión, un libro revolucionario, en cuanto plantea una nueva forma de entender, no sólo el medioevo, sino la cultura occidental en su conjunto, y más en concreto la filosofía occidental.
Por favor, confiad en mi, no perdáis el tiempo en libros menos "nutritivos", e id derechitos a vuestro librero a encargar este volumen. De verdad que no os arrepentiréis.

11 comentarios:

Joaquín dijo...

Tomo buena nota. Pero, recomendación por recomendación, te anoto La filosofía de la India, de Helmuth von Glasenapp (Ed. Biblioteca Nueva, 2007, original 1948). Además de mostrar que todos los sistemas filosóficos que se nos han podido ocurrir a los occidentales, tienen un paralelo en alguna escuela o corriente hindú, sirve para adentrarse en formas nuevas de contemplar la realidad, que trascienden la lógica dualista aristotélica.

No hay que desconocer que entre los antiguos griegos (muy evidente en Platón, quizá menos en Aristóteles) afloran visiones místicas y no-dualistas.

Otro día hablamos de R. Panikkar.

Borja Lucena Góngora dijo...

D. Cógito: El día que quedamos a tomar un café para charlar y contarte yo mi viaje al este de Europa -en gran medida fomentado por tu perseverante proselitismo "eslavo"- apareciste con un libro bajo el brazo (aparte de los miles que encerrabas en tu enigmática cartera negra). Me dijiste: "este es El Libro". Inmediatamente pensé que habías sufrido una rara conversión al maoísmo y me ibas a obligar a leer el bodrio del Libro Rojo, pero resultó ser éste el libro del que ahora nos hablas. Lo apunto, invitado por la vehemencia de tu recomendación.
Ciertamente, me parece prometedor el esfuerzo de revisión del pasado que, desde el último cuarto del siglo pasado en adelante, se está poco a poco extendiendo. Había muchas cosas que se habían desechado de manera apresurada y gratuita, muchos esfuerzos que, por el solo hecho de haberse dado antes de 1500 (pongamos), habían sido desterrados del ámbito de lo significativo. Una lectura superficial de la filosofía medieval -ya sabes que no es mi especialidad, aunque también es cierto que carezco de especialidad alguna- permite apreciar que la filosofía moderna no eclosiona como una explosión primigenia: de la nada, nada proviene. Leer a muchos filósofos medievales es encontrarse con intuiciones magníficas, con ideas embrionarias -y muchas veces no sólo eso, sino ya plenamente desarrroladas- que después encontraron su medio en la filosofía moderna e, incluso, contemporánea. Por eso, tu libro promete.
Un abrazo.

Don Cogito dijo...

Tomo nota Joaquín...

de Panikkar tengo un libro (que ahora no me acuerdo como se llama) referido a la vida monástica

Por cierto tengo un "Pensamiento Cautivo" (eso si aviso, muy subrayado) para ti. Si lo quieres te lo envio encantado. "Invita la casa"

Saludos

Don Cogito dijo...

Bueno Borja, es que es un libro muy interesante. Además creo que tu lo disfrutarás mucho más que yo... en alguno de los trabajos utiliza terminología aristotélica que, estoy seguro, captas mejor.

Además, me acordé mucho de ti leyendo algunos capítulos en el que De Muralt hace (para mi gusto) un análisis muy bueno de la actual situación de la filosofía.

Tampoco está mal para empezar el otro libro al que me defiero que editó Istmo.

... y por supuesto saludos

Fran Capitán dijo...

Le creo, don Cógito, le creo. Hay mucho doble de Chesterton circulando por ahí, pero el genuino era único...
Por cierto, gran artículo sobre filosofía medieval, esa gran desconocida. Un gran abrazo.

Joaquín dijo...

Joaquín/Cógito, espero visitar Madrid este otoño. Cuando llegue el momento te aviso, y quedamos en los madriles a tomar café, o pinto de tortilla y caña, y hacemos intercambio de cromos.

Don Cogito dijo...

encantado Joaquín... a ver si es verdad

Saludos

Don Cogito dijo...

GKCh
Tienes toda la razón Chesterton es Chesterton pero te prometo que más de una vez he sentido un escalofrio cada vez que me cruzo con este señor por la calle.

Saludos

Joaquín dijo...

¿Qué exposiciones o cosas que ver que merezcan la pena hay en Madrid esta temporada?

Saludos

Don Cogito dijo...

... hombre, así de repente, se me ocurre de repente, la exposición que están haciendoe en el Prado de El retrato del Renacimiento y la proxima de Rembrandt.
Y en el Thyssen la de Avigdor Arikha y la próxima que será sobre la relación dentre la vanguardia y la primera guerra mundial...

Muchos saludos

Anónimo dijo...

Don Cogito: efectivamente, De Muralt es una figura de lo más interesante en materia de historiografía de la filosofía. Su libro acerca de la fenomenología fue un hito en su momento, pues superando ampliamente las exposiciones que los mismos autodenominados "fenomenólogos" habían dado de ella, De Muralt deshizo la creencia escolar de que sólo un "fenomenólogo" de pura cepa podía hablar de la fenomenología. La resonancia de ello para la fenomenología fueron desde todo punto de vista positivas (pero no para los ortodoxos fenomenólogos).
Es una lástima que aquí en Argentina no existan otros trabajos traducidos de este buen hombre. Durante años sólo hubimos de contentarnos con sus publicaciones originales, inaccesibles a buena parte del público. Para peor, algunas editoriales españolas no mandan sus ejemplares a estas tierras. Tal es el caso con esta aparición que tú hoy nos compartes. Por eso mi petición es la siguiente: considero que no sería agravio editorial si, en caso de disponerla, puedas enviar una copia digitalizada de algún capítulo de este libro para que tanto yo como otros colegas podamos atisbarlo. Mi correo es agusmagno@hotmail.com
Si piensas que es posible, te estaría muy agradecido. Os saludo desde aquí, no sin antes expresar lo interesante que me ha parecido tu blog...