Fotografía antigua de Gibara. |
Este es un pueblo... un pueblo con pretensiones de ciudad. Tiene unos quince mil habitantes. Está en la costa oriental de Cuba. Se llama...
Gibara. El nombre del pueblo ha sido pronunciado por uno de sus hijos
más ilustres: el escritor don Guillermo Cabrera Infante. Al que recibimos hoy
en el programa.
Fue aquí donde empezaron a dispararse las primeras ilusiones y los
primeros sueños del que había de ser uno de los intelectuales más precozmente…
llamados a establecer una polarización en torno a su persona, y una curiosidad
que es hoy internacional.
Guillermo Cabrera Infante ha sido un hombre precoz… ha sido un hombre
que escribió… que empezó a escribir muy pronto… teniendo a penas… ¿Cuántos
años?
-Dieciocho años.
Dieciocho años. Tenemos una serie de fotografías en un álbum que iremos
viendo poco a poco en el que en diversas etapas de su vida, de su joven vida,
le vemos manejando ya máquinas de escribir. Esa precocidad suya le ha
acompañado en muchas otras cosas. Con esa misma precocidad colgó los estudios
de medicina… si no estoy equivocado
-Sí.
También fue precoz para casarse. Para la literatura y para el amor. Y
fue precoz en otras muchas otras cosas de las cuales tendrá noticia el
espectador a partir de este momento.
¿Cómo era el entorno social en el que nació Guillermo Cabrera Infante?
-Bueno a mí… me gusta que la
pregunta porque me gustan las cronologías. Tengo que comenzar diciendo que nací
en 1929. El 22 de abril. Fecha también en la que nacieron Lenin y Shirley Temple. Esto me ha condenado políticamente, y me ha llevado también
a tener que ver con el cine. 1929 fue el año del gran crack financiero mundial,
y esto me ha convencido de que nunca seré rico.
No hay razón alguna para sospechar que eso no pueda tener… otra cara… ¿no?
-Mera superstición de números y
fechas.
Bien. En ese año 1929, que el que nace Guillermo Cabrera… ¿Cómo era la
vida en Gibara?
-Era una vida que comenzaba a
cambiar porque el puerto era… había sido muy importante durante la colonia
española y los primeros años de la república. Y después cuando construyeron la
gran carretera central, el pueblo comenzó a quedar a un lado, y fue
convirtiéndose, poco a poco, en un pueblo fantasma. Ya cuando lo abandonamos mi
familia y yo, en 1941, había descendido mucho como pueblo, pero en realidad,
era un pueblo muy bello, muy amable, como tantos otros pueblos tropicales, que
podemos encontrar en Venezuela, en América central. Y yo nací de… padres… mi
padre que era tipógrafo, periodista local, y mi madre que tenía inclinaciones
políticas, tanto que ellos dos fueron fundadores del Partido Comunista en el
pueblo en el año 34… Tengo un recuerdo muy preciso de los avatares a los que
condujo esta inclinación política. De haberme despertado un día, cuando yo
tenía siete años, en 1936, y ver pasar corriendo a mi madre hacia el fondo de
la casa, perseguida detrás por mi hermano, y después de eso, dos guardias
rurales que era la policía… rural de Cuba, que entraban con armas en la mano
persiguiendo a mi madre hacia dentro de la casa. Resultaba que ellos, es decir
mis padres, eran encargados de la propaganda comunista en el pueblo, y estaban
vigilados. Entonces esta mañana cogieron presa a mi madre (mi padre no estaba
en la casa, se presentó más tarde a las autoridades) y los dos fueron llevados
a la capital de la provincia, Santiago de Cuba, que queda como a unos
quinientos kilómetros de Gibara… y aquí me tropecé yo con mi primera soledad…
es decir que me quedé en manos de mis abuelos, y padecí mis primeros trastornos
psíquicos que después, ya mayor, se convirtieron en un nervous break down del que creo que hablaremos en el futuro.
Quedamos entonces, en que hay, por razones políticas, unas primeras
crispaciones, unas primeras vivencias casi traumáticas en el niño Guillermo
Cabrera… en ese niño que estaba apenas estaba empezando a enterarse de lo que
había al alrededor… supongo que yendo al colegio…
-Sí.
… estudiando ya…
-Cosa curiosa yo estudiaba en un
colegio de cuáqueros que se llamaba “Los amigos”, hasta que mis padres fueron
presos. Después que ellos regresaron al pueblo mi padre tuvo dificultades económicas.
Y tuve que dejar el colegio y asistir a la escuela pública y finalmente él se
trasladó a La Habana en el año 1940 y luego nos trasladamos todos en el año
1941. Y ahí terminó mi niñez… que fue pobre… es decir éramos bastante pobres
nosotros… pero fue muy feliz… y comenzó una adolescencia pobre también, pero
más infeliz que la niñez porque había dejado el pueblo, una casa grande, la
familia... Y nos encontrábamos entonces en La Habana viviendo en un cuarto, un
falansterio (que se llaman “solares” en Cuba) y ahí la vida era muy reducida y,
bastante miserable.
Se ha dicho siempre que la edad feliz es la juventud, y sin embargo tantas y tantas veces cuando escuchamos a la gente contar sus vivencias parece que la adolescencia y la juventud han sido las edades de mayores infortunios.
Fotografía antigua de Gibara. |
Se ha dicho siempre que la edad feliz es la juventud, y sin embargo tantas y tantas veces cuando escuchamos a la gente contar sus vivencias parece que la adolescencia y la juventud han sido las edades de mayores infortunios.
-Para mí fue… terrible. Es decir,
es un proceso que yo quiero volver a pasar… y a veces con mis hijas, que están
en la adolescencia las dos, pienso de lo difícil que se hace la vida para un
adolescente. Sin embargo es una época en la que uno está tan seguro de tantas
cosas. Piensa que tiene la verdad de… la verdad de la vida. Cree que el futuro
es tan largo como la eternidad. No piensa en la muerte. Cosas que van
apareciendo después con los años maduros.
¿Qué impresión le causa al joven Guillermo Cabrera Infante esa
irrupción en la vida de la ciudad?
-Ah, fue un gran descubrimiento.
Fue una gran aventura. Para mí la ciudad fue deslumbrante. La Habana medeslumbró con sus luces, sus anuncios luminosos, la vida tan ajetreada, tantosautomóviles por las calles, cuando en mi pueblo apenas había automóviles… tantagente… era una ciudad de cerca de un millón de habitantes entonces… y fue paramí una experiencia fascinante… es decir… yo sueño mucho con esa Habana y esa
Habana, está parte del ella, descrita en mis libros.
Nos decía antes Guillermo Cabrera que él nació el mismo año del crack de los Estados Unidos…
-De Wall Street.
De Wall Street. El mismo año en que nació Lenin…
-No, el mismo día.
… el mismo día en que nació Shirley Temple, pero también habría que añadir, como otro dato importante para la
biografía de Guillermo Cabrera, que nació en Oriente, en la provincia que es
también la que dio a… a cubanos tan históricamente famosos como Fulgencio
Batista, el último dictador, y Fidel Castro, que es el actual líder… de la Cuba
de hoy.
-Cosa curiosa hemos nacido los
tres en un radio de cien kilómetros… es decir Gibara, que por mucho tiempo se
pensó que era el puerto por el que había desembarcado Cristóbal Colón por
primera vez en Cuba, en 1492, y para desengaño de los vecinos del pueblo se
descubrió que Colón, efectivamente, había desembarcado unos seis kilómetros en
otro puerto aledaño. Y Banes, que está a unos 50 kilómetros de Gibara, fue
donde nació Batista y en Birán, más hacia el interior de la provincia, a unos
70 kilómetros de Banes y Gibara, nació Fidel Castro.
¿Tiene la provincia de Oriente unas características especiales como
para dar una cierta clase de hombres?
-Era una provincia que era la más
grande y la más rica de Cuba. Era también la más independiente. Tanto que en un
tiempo se pensó en hacer una provincia federal de la provincia de Oriente. Allí
nació uno de los grandes libertadores de la época de la colonia: Antonio Maceo
y en ella murió José Martí, el que se ha llamado el apóstol de la libertad de Cuba.
Adenda:
La Habana. Pre-1958. Neptuno y Amistad, mirando a Roseland. (Ver enlace)
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